Este miércoles 25 de abril, se celebra el Día Internacional de la lucha contra el Maltrato Infantil, una fecha en la que diversas instituciones como el Plan de Intervenciones Colectivas Salud Pública de la E.S.E Hospital San Juan de Dios, hacen énfasis en sus labores para fomentar los derechos de los niños, a fin de concienciar a la comunidad sobre las consecuencias del maltrato en menores.
- Maltrato infantil: se define como toda acción u omisión intencional que provoque daño físico o psicológico en niños, niñas y adolescentes, practicada por los adultos encargados de su cuidado y desarrollo: padres, tíos, maestros, educadores, etc. El maltrato puede ser físico, psicológico o por negligencia.
- Físico: cualquier acción intencional que provoque daños físicos en el niño, sean estos visibles o no, como por ejemplo: quemaduras, golpes, pellizcos, fracturas, entre otras.
- Psicológico: es cualquier actitud que provoque en el niño o niña sentimientos de descalificación o humillación.
- Por negligencia: es la no protección del niño ante eventuales riesgos y la no atención de sus necesidades básicas cuando los padres o cuidadores están posibilitados para hacerlo.
- Abuso sexual: es el ejercicio abusivo de poder de un adulto hacia un niño que implica la satisfacción sexual de quien lo ejerce en detrimento y desconocimiento de la voluntad del niño.
Otra forma de someter a los niños a situaciones de violencia es cuando estos son testigos de maltrato o abuso sexual hacia terceros. Se considera que las consecuencias son similares a las que experimentan los niños que viven la situación de violencia en forma directa.
Verónica Cataño Acevedo, es la coordinadora del equipo de Salud Pública. Dentro de su agenda para este 2018 se propuso comenzar desde el mes de enero, con actividades relacionadas con el maltrato a menores. Asegura que durante el 2017 se registraron en Colombia aproximadamente 10.951 casos reportados ante el ICBF y Comisarías de Familia de maltrato infantil.
Salud Pública maneja varias estrategias de intervención, entre ellas la articulación con todas las Instituciones Educativas del Municipio, programa Buen Comienzo, padres de familias, niños y niñas, bajo herramientas como la didáctica y el juego. Apunta Ana Cristina Vásquez, promotora Salud Pública.
¿Cómo actuamos? A través del acompañamiento que hacemos a las familias que están en riesgo, elevamos su capacidad para proteger a los niños y niñas del maltrato, la negligencia, el abuso y así prevenir la separación familiar.
Un entorno familiar protector, garantiza el bienestar físico y emocional del niño o de la niña, que puede establecer relaciones estables y de confianza con sus padres u otros cuidadores, hermanos y hermanas. El niño o la niña disfrutan de una infancia plena que le permite desarrollar todo su potencial y así prepararse para el futuro.
