Facilitar herramientas a los y las sobrevivientes del conflicto armado a través de encuentros grupales que apoyen su recuperación emocional como parte del programa de acompañamiento, Validar la experiencia emocional de los y las sobrevivientes como expresiones naturales ante eventos anormales producidos en el marco del conflicto armado, Validar el sufrimiento de los y las sobrevivientes en el reconocimiento del sentido de resistencia ante el hecho victimizante, Construir relaciones entre los miembros del grupo que permitan potenciar recursos de afrontamiento, la capacidad de resistencia y de superación de los hechos de violencia entre otros. Según lo afirma la profesional, Yarumal tiene un senso de 9 mil a 10 mil víctimas del conflicto armado.